Goce

Soy tu tierra y tu deseo en cruz.
Me abro a tu lascivia de pastizales y desiertos.
En la posesión y el hastío.
En el goce y en el asco de tus barros y tus líquidos.
Hembra de tu hembra en el sol de cada boca.

hereje

esta noche
muero en la hoguera
de tus infames
deseos

loba

Quizás llegues una de estas noches
y te arrodilles frente a mí
y me pidas que te monte
y en esa cópula
terminemos por quebrarle las patas
a este animal
de mi solitaria pesadilla.

tu jardín

Déjame que esparza
manzanas en tu sexo
néctares de mango
carne de fresas.
Tu cuerpo son todas las frutas…

Gioconda Belli

Sabemos

Sabes que me gusta
esperarte así
Sé que te gusta
que te espere así

con tus ropitas
las mías

Sed

Beberé cada noche
tu dulce orín

es tarde ya
méame, por favor
méame

por favor

Acaricia mis nalgas
lame mis tacos
frota mis piernas

hunde tu verga
en esta puta sedienta
que soy para tí

desgárrame
te lo suplico

ritual

Inclínate

ante mi altar
cada luna
y bebe
la sagrada sangre
vertida por mis entrañas

bendito seas

urgencia

Derrama
tu dulce licor
sobre mi piel

embriágame
penétrame

hazme
tu mujer
ya!

cuando

loca de placer
me retuerzo

cuando

frotas tus piernas

contra las mías

cuando

deslizas tu lengua

por la curva de mi empeine

cuando

tus labios se posan

sobre el negro cuero
de mis tacones

ternura

Pronto vendrán días
en los que todo mi ser
se crispe tierno
para evacuar ese óvulo
burlado por mi voluntad.

Mis pechos se vuelven
tan frágiles
que no soporto
su propio peso.

Pero al mismo tiempo
qué goce el mío
cuando te muestras
más tierna y dulce
apaciguando el dolor
con tu lengua
en mis pezones.

.

.

aquelarre

Entre vuelos de escobas
y macabras carcajadas
en una noche de fiesta nuestra
encontré otra bruja
que en tres días
hechizó mi corazón para ella.

dualidad

"Un hombre corazón de gacela,
caso muy raro cuando es tan puro como tú,
es la pareja ideal,
pues combina las cualidades de los dos sexos;
encarna lo que vosotros llamáis androginia.
Si encuentra su complementario
conocerán ambos el Paraíso en la Tierra"

José Luis Sampedro

primitiva

Sé involuntaria. Sé febril. Olvida
sobre la cama hasta tu propio idioma.
No pidas. No preguntes. Arrebata y exige.
Sé una perra. Sé una alimaña.

Resuella busca abrasa brama gime.
Atérrate, mete la mano en el abismo.
Remueve tu deseo como una herida fresca.
Piensa o musita o grita «¡Venganza!»

Sé una perdida, mi amor, una perdida.
En el amor no existe
lo verdadero sin lo irreparable.

Félix Grande

dulce dolor

hunde
las agujas de tu placer
en este cuerpo mío
de hembra en celo

sola

placeres solitarios
calcinan mi cuerpo
deseos inconfesables
estallan en mi mente

condenada

Atada a tus vicios
gimo de placer
ardo de lujuria

Señora mía
castígame
por desear
lo prohibido

penétrame

solo eso
penétrame
penétrame
hasta matarme

abierta

Bebo tus labios
me como la blancura de tus manos
y de tus pies
mi boca está abierta
como un cántaro vacío
y abierto...

Quiero así

Quiero ser un ensueño leve
Que levante dulcemente tu falda.
Quiero dormir en tus muslos
Y aspirar la neblina de tu perfume nacarado,
Quiero vislumbrarte
En la transparente estela
De tu suave temblor,

No quiero tocar tu piel


Aspiro a sobrevivir en tu mirada
Cerrado los párpados
Abierto tus labios…

Hay una forma de amor que quiero sentir contigo
Enséñame a ser dulce

Neiffe Peña

Nos

Yo me acuesto
acogiéndome a una hembra
que replica mudamente
combates de pasión y seducción
Sus brazos como yedra
se abalanzan
sus dedos acometen
en franca vibración
su lengua se embeleza
en mis pezones
e invita a su boca
erigirme en tornasol

...

arde mi piel
cubierta de látex
corren mis flujos
entre tus piernas
hundo mi pene
entre tus pechos
lame mis pies
mis altos tacones
no sé quien soy
vos
o
yo

Quiero

Tras veintiocho días
del periplo lunar
piedra sobre piedra
hoja sobre hoja
tímidamente
el ansia de vida de un millón
de años
la tormenta de polvo hace nido
en un grano de arena del desierto
calcinado
por un millón de soles
cuajan un poco de sangre
cada vez.

Augusto Roa Bastos

*

Lujuria

Bebemos el vino sagrado de la lujuria. Nos desnudamos siete veces bajo el cielo del hastío y fornicamos como animales de fuego. Nos crecen alas de tanto copular con nuestras sombras, de entregarnos a caricias reptiles y a desgraciadas mutaciones de la tristeza. Derramamos ese vino sobre la frente de los elegidos. Les suplicamos a sus vergas y a sus vaginas que no escatimen esfuerzos en estas batallas de camas tempestuosas.






Naufragamos en el amor pero nos salva el último placer de un cuerpo mutilado por la soledad. Nos emborrachamos bebiendo de la boca de ese amante que sólo puede pronunciar el nombre del dios que se alimenta de falsos orgasmos de putas.
Después de la orgía vomitamos las unas sobre los otros, excitándonos nuevamente en un delirio de inmundicias y nos abrazamos al cuerpo más frágil que nos ofrece su suavidad, su inconcebible ternura y su abandono.

Te amo

A mí en el pecho el corazón
se oprime sólo en mirarte,
ni la voz acierta de mi garganta a prorrumpir,
y rota calla la lengua.

...

Yo te buscaba y llegaste,

y has refrescado mi alma

que ardía de ausencia.

Safo

Puta

Soy tu puta
y qué?

Soy

bebe
el dulce nectar
de mi sexo

lame
la humedad
de mi vagina

besa
con ardor
mi indisimulada verga

penetra
esta ardiente hembra
que no soy

o si...

Tuya

Amas
la hembra
que hay
en
mi

Así

Tus brazos
rozan la piel
de la hembra sedienta
que florece
en la oscuridad de tu deseo.

Extasis

Amo la pared
que besa la palma de mis manos
y cobija mi frente
mientras tu voz delate tu mirada en mi espalda
cuando tus dedos pasean, clandestinos,
cada rincón de mi cuerpo.

Aspa del éxtasis que lleva el viento,
la tarde se va
sumergida en el aroma de un me-entrego.

Pura Salceda

Ellas

Bésense en la boca, lésbicas
baudelerianas, árdanse, aliméntense
o no por el tacto rubio de los pelos, largo
a largo el hueso gozoso, vívanse
la una a la otra en la sábana perversa,
y áureas y serpientes ríanse del vicio
en el encantamiento flexible, total
está lloviendo peste por todas partes
de una costa a otra de la Especie,
torrencial el semen ciego en su granizo mortuorio
del Este lúgubre al Oeste,
a juzgar por el sonido y la furia del espectáculo.
Así,
equívocas doncellas, húndanse, acéitense
locas de alto a bajo, jueguen a eso,
ábranse al abismo, ciérrense como dos grandes orquídeas,
diástole y sístole de un mismo espejo.
De ustedes
se dirá que amaron la trizadura.
Nadie va a hablar de belleza.

Gonzalo Rojas

Te veo en mí

Sabor de tu piel
en la blanca corola
de tus senos
y en la oscura y dulce fruta
de tu sexo.

Luz Méndez de la Vega

Nosotras

Pase lo que pase con nosotras, tu cuerpo
vivirá en mí... tierno, delicado,
tu forma de hacer el amor,
como la fronda semi enroscada del helecho en espiral en los bosques
recién bañados por el sol. Tus viajeros y generosos muslos
entre los cuales mi rostro entero se hunde una y otra vez...
la inocencia y sabiduría del lugar que mi lengua ha encontrado ahí...

La viva, insaciable danza de tus pezones en mi boca...
Tu forma de tocar, firme, protectora, investigándome,
tu lengua fuerte y tus finos dedos
llegando donde te estuve esperando por años,
en mi rosa, húmeda cueva...
Pase lo que pase, esto es.

Adrienne Rich

Mujer

Sueño con un lugar entre tus pechos
para construir mi casa como un refugio
donde siembro
en tu cuerpo
una cosecha infinita
donde la roca más común
es piedra de la luna y ópalo ébano
que da leche a todos mis deseos
y tu noche cae sobre mí
como una lluvia que nutre.

Audre Lorde

Ardiente

húmeda piel
sobre mi piel
inflamado goce
de mi sexo
sagrado

A sus pies

Poséeme, oh, Señora mía
ahógame entre tus oscuros deseos
hazme puta esclava
de tu salvaje
placer

Rendida

Puta y princesa
que habita en palacios de hojarasca
tu voz me guía
lejos;
por adentros transeúntes del deseo.

Camino hacia tu abismo
en esta pasión sin predecibles
perra y guerrera en mil combates,
ante ti rendida,
lamiendo impúdica y orgullosa
los pies de su ama.

Pura Salceda

Ellas

bésame,
muérdeme,
bébeme,
penétrame
hazme tu hembra
tu gata hambrienta
sedienta, lujuriosa
hereje
puta

Dominatrix

písame

penétrame

Ama mía

oríname
castígame
soy tu esclava

lasciva

puta

tuya

toma mi cintura
acaricia mis nalgas
mías
tuyas

Semen

Beberé tu licor
me embriagaré
solo para ser
tuya

Yo

Y arderé de placer
estallaré en mil orgasmos
suaves, lentos, profundos.

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Autor desconocido